Supersticiones, mis bolainas

Hace muchos años, un hombre llamado Pepe Lotudo vivió un momento de ridiculez extrema. Estaba encamado con su amante, una nena de 16 años, cuando su esposa entró y lo vió. La cornuda feliz, puso el grito en el cielo exclamando con fervor: "Pedazo de hijo de mil puta, ¿cómo pudiste?", a lo que Pepe respondió: "No es lo que parece".
Desde ese día, la sociedad recuerda al 15 de agosto como el Día de los Ridículos.
Pregunta 1: ¿Crees esta historia?
Respuesta Asegurada 1: No.
Pregunta 2: ¿Por qué no?
Respuesta Asegurada 2: "Porque es pardójicamente ridículo"
Bien, aunque es debatible, es una respuesta sincera.

Un día iba con un amigo por la calle (no diré quién era), y cuando estuvo a punto de saltar un charco, lo detuve con un grito: "No, no lo saltés".
-¿Porqué? -me preguntó.
-¿No sabías que saltar un charco es de mala suerte? -le pregunté con el ceño fruncido y detectando que aún no identificaba en mi tono de voz la ironía.
-¿Porqué de mala suete?
-SI saltás un charco, el día que vayas al mar, un tiburón va a aparecer y te va a comer las pelotas -le dije con un tono burlón.
-¡Cualquiera! -exclamó y comenzó a caminar.
Lo seguí y le pregunté porqué creía que era cualquiera.
-Es ridículo -me contestó.
-Pero es una superstición, como en las que vos creés -le dije oyéndome creíble-. Yo la inventé.
-Con razón -musitó sarcásticamente.
-¿Qué? Es una superstición que yo inventé, ¿no la vas a seguir?
-¡No, porque es una gilada!
En ese momento, me había dado el pie que esperaba para lanzar mi bomba.
-¿Y cómo creés que se inventó la supersitición del gato negro y todas las otras? Un boludo la inventó en un momento, y varios giles lo empezaron a seguir. Ahora es una creencia mundial. ¿Por qué? No tengo nada en contra de la superstición, pero que sea exagerada como vos, es mucho.
Este amigo, veía un Fitito azul y ya hacía una señal con las manos, por buena suerte. Veía un ambarazada y significaba algo. Veía pasar un avión y era otra cosa. Al igual que con los perros cagando en la calle: hacía como que agarraba la mierda en el aire y metía la mano en el bosillo, después decía: "Es para riqueza".
-La riqueza no se gana agarrando mierda de perro y metiéndola en tu bolsillo, sino con trabajo, robando o ganando la lotería.
Pero parecía que mi realismo (rebeldía, para todos), era lo que estaba exagerado en toda esa puta situación.
Igual que todas las creencias que rondan el mate. Estamos en la ciudad, que los del campo tengan sus creencias, está perfecto, pero ponerlas en práctica nosotros, sin saber el real, real significado, es amargo.
Mucha gente se aferra de la frase "Por algo será". Bien, eso también es parte de la superstición. Y he visto, sin embargo, que cuando estas personas que se manejan con aquella frase, la dicen cuando le pasa algo negativo a alguien ajeno a uno mismo.
-Uh, loco, me echaron del laburo. Dejé a mis hijos sin el pan -dice uno.
-Bueno, viejo. Por algo será, quizá ese no era tu destino -dicen tratando de animar al pobre infeliz, y no lo logran.
Cuando son ellos quienes pierden algo, y le repetís su querida frase, no les convence ni consuela.
Bueno, un mundo sin superstición, no es un mundo armónico, pero nadie afirma que un mundo armónico, sea el mundo correcto.

22-01-08

Los Chilenos

He ido a Chile dos veces.
La verdad, que de los chilenos tengo dos cosas antagónicas para decir. Una: son ordenados y organizados. Y dos: son basura con los argentinos.
Aunque haya dicho esto, los chilenos, siguen siendo mejores personas que nosotros.
Cuando pasé por la Aduana Argentina, me encontré con una cola enorme de gente disgustada por el lento servicio y la relajada atención al público. Qué raro, ¿no?
Cuando por fin es tu turno, los argentinos, compatriotas, te atienden con cara de orto, son cortantes y se ponen en palanca, haciendo las cosas más lentas. De este modo, logran disgustar más a la gente que quiere cruzar la frontera. Es la clásica actitud argentina, de "estos están al pedo, viajan a Chile a gastar guita, y yo como un boludo laburando... que se caguen".
Cuando, después de dos horas de trámite, llegás a la Aduana Chilena, como mucho (y en horas pico), hay cuatro colas distintas, organizadas, ordenadas, y no hay más de diez personas en cada una. Los trámites se hacen rápido, son respetuosos con la gente y despachan rápido para que no se junte la gente y termien disgustándose.
Cuando pasás el límite entre los países, lo que se ve es otra historia.
Las calles limpias, no hay papelitos, ni bolsas flotando por el viento puntarenense, ni gente en la calle pidiendo.
He sabido que si los carabineros (que es la policía chilena) te ven tirar un papelito en la calle o en la vereda, te multan. También he sabido de buena fuente, que si te ven sacando fotos en un lugar de importancia política, te quitan la cámara, te borran las fotos y te la devuelven. Hasta en eso son honestos. Cuidan lo suyo de las manos soberbias, envidiosas y odiosas.
Eso sí, tienen la otra cara que lo opaca y hasta a mí me da bronca. En la entrada de Punta Arenas, hay una estancia, en donde unos familiares fueron a comer y vieron un mapa de Chile y Argentina juntos, en donde el territorio argentino marcaba sus límites, desde la Quiaca, hasta el Río Colorado, es decir en el comienzo de la Patagonia. Desde el Río Colorado, hacia el Sur, lo que sería Río Negro, Chubut, Santa Cruz y Tierra del Fuego, figura como territorio chileno.
Otra de las cosas que me enteré y me dejaron mal, es un monumento que está asentado en la Plaza Principal de Punta Arenas, regalo de los ingleses, en agradecimiento por el apoyo chileno en la Guerra de Malvinas contra nosotros.
Es inaudito ver estas cosas.
Asimismo, me he dado cuenta de algo que refuta años y años de convencimiento. Desde que recuerdo, se ha dicho que Río Gallegos era la ciudad más austral del continente. Esto es, para que sepan, medido desde el Canal de Panamá, hasta el Esatrecho de Magallanes, ya que en el canal, América Central de divide. Y en el Estrecho de Magallanes, se separa América del Sur de Tierra del Fuego.
Viendo a simple vista, tienen razón, es Gallegos, ya que no podría ser Ushuaia, porque es una isla, pero no es Gallegos.
Mirando un mapa, me di cuenta que la ciudad más austral del continente, es Punta Arenas... y es territorio chileno.
Hay un consuelo. Si a esta estadística la manejamos como la ciudad más austral del Continente Americano, contando islas, así sí, sería Ushuaia. Ojo, decimos CIUDAD. Porque hay algunas islas cerca de la Antartida que son extranjeras, pero que no llegan a ser ciudades.
Así es. Chile jugará mal al fútbol, los tendremos cagando en el deporte, pero estos tipos están armados hasta los dientes, y si nos quieren joder con la Patagonia, solo tienen que volar en pedazos el puente que comunica la Isla Pavón con Comandante Luis Piedra Buena y nos cortan el paso. Fuimos.
Y no podremos ser cara duras de querer pelearles, porque con el arsenal de honderas que tenemos, no vamos a hacer mucho, ¿o no?

04-01-08